Las puertas integradas en la pared son la solución para trasformar  tu casa con un toque de diseño, sin renunciar a la funcionalidad de soluciones que permitan separar ambientes y esconder armarios.

Las puertas integradas, también conocidas como «Filomuro» de su nombre italiano, son una idea genial y no sólo para optimizar los espacios.

Gracias a ellas es posible crear accesos invisibles: las puertas integradas pueden ser de hecho correderas o abatibles. Las puertas desaparecen porque no hay elementos a simple vista. Son perfectas para cualquier ambiente, también para crear cómodos vestidores.

La ausencia de salientes hace así que la puerta, une vez cerrada, deje espacio a una pared plana que cada uno puede personalizar como prefiere: con el color, con el papel de paredes o wall stickers.

El exclusivo diseño del galce garantiza la total integración en el muro.

Los sistemas correderos tienen además la ventaja de abrirse sin ocupar espacio, haciendo así más amplios los ambientes reducidos.

Las puertas integradas en la pared son un sistema perfecto para esconder las hornacinas: esconder tuberías y cables gracias a puertas armarios integradas en la pared con registros que se abren gracias a un sistema de push and pull, sin pomos a la vista. Así sólo tu sabrás que detrás de estas puertas se esconden pequeños almacenes y habitáculos.