La marca de muebles low cost Ikea, está retirando del mercado estadounidense 27 millones de cómodas Malm después de algunos graves accidentes causados por los muebles, de los cuales dos mortales.
Un niño de dos años del estado de Pensilvania y otro de ventitrés meses, residente en el estado de Washington, murieron en el 2014 aplastados por una cómoda del modelo Malm.
Además de la muerte de los dos niños durante el año pasado, la empresa recibió otras 14 avisos de accidentes con protagonista siempre la misma cómoda y que han causado heridas leves a otros 4 niños.
El pequeño Curren, muerto aplastado por la cómoda Malm de Ikea
A hacer publica la noticia del retiro del mercado de la cómoda Malm por parte de la marca sueca, ha sido el portavoz de la Us consumer product safety commission (Cpsc), la agencia de Estados Unidos que se ocupa de verificar la seguridad de los productos para el mercado estadounidense. Ya el pasado enero, la Comisión había lanzado un vídeo en el cual se enseñaban medidas de precaución que hay que adoptar para la seguridad de nuestros niños en nuestras casas.
Ikea aconseja a los clientes que compraron la cómoda de contactar con la empresa. Los adquirentes no están obligados a devolver los muebles pero tienen a sus disposición un kit de anclaje en el caso hubiesen perdido el original.
Han tenido que morir dos niños y otros cuatros resultar heridos, para que Ikea insistiera claramente que las cómodas Malm van ancladas a la pared.
El fabricante sueco de muebles ha recordado que en las instrucciones se dice claramente que estos muebles deben ir anclados a la pared.
Estas son las recomendaciones de Ikea:
- anclar a la pared cualquier mueble que supere los 60 centímetros de altura si hay niños en casa (y los 75 centímetros si no hay).
- prestar especial atención a las cómodas Malm.
